Los problemas de humedad son, por desgracia, un clásico frecuente en los edificios y en la administración de comunidades de propietarios. Pero, ¿quién debe ocuparse de ellos? Os respondemos a este y otras cuestiones a continuación.
¿Quién debe encargarse de solucionar el mal aislamiento de un edificio?
En un edificio en régimen de Propiedad Horizontal, la obligación de solucionar los problemas de humedad del edificio y su mal aislamiento recae sobre la comunidad de propietarios. Así lo establece el artículo 10 de la Propiedad Horizontal.
Según este artículo, la comunidad de propietarios del edificio tiene la obligación de mantener el inmueble en condiciones de conservación y mantenimiento adecuadas.
Cuando estas condiciones no se cumplen, las comunidades de propietarios están en la obligación de llevar a cabo las reparaciones adecuadas para conseguir una buena conservación del edificio y mantenimiento de todos los elementos de la comunidad que no se encuentren en buen estado. Como pueden ser aquellas paredes o techos que hayan sufrido los problemas de humedad.
Por tanto, los propietarios de las viviendas del edificio tienen el derecho de poder demandar judicialmente a la Comunidad de Propietarios si se produce el incumplimiento de tal obligación. Y al ser un derecho concedido por ley, no es posible la existencia de acuerdos comunitarios que desestimen reparaciones.
La solución a los problemas de humedad en los edificios
Como ya hemos comentado, es muy frecuente que la humedad haga de las suyas en los edificios. Especialmente en las viviendas viejas que sufren un mal aislamiento por no haber elegido los materiales adecuados en su construcción o la orientación adecuada.
Concretamente, son los edificios que se construyeron antes del año 2006 los que más sufren las consecuencias del mal aislamiento. Ya que fue en este año cuando se aprobó el Código Técnico de Edificación.
Este mal aislamiento puede solventarse con una rehabilitación energética del inmueble. Favoreciendo así la existencia de condiciones térmicas óptimas para el edificio.
Con esta rehabilitación se consigue lo siguiente:
-Una reducción en las pérdidas de frío y calor de las viviendas
-La consecución de temperaturas homogéneas que permitan la comodidad de todos sus habitantes
-La prevención de la humedad
La eficiencia energética de un edificio es la capacidad de la vivienda de aislar el interior de ésta del exterior. Por lo que puede mantener la temperatura fresca en verano y cálida en invierno. No obstante, dado la novedad de los requisitos que hacen posible esta eficiencia energética, la mayoría de viviendas en España no cuentan con tal característica.
¿Por qué algunas viviendas del edificio tienen peor eficiencia energética que otras?
En la eficiencia energética de una vivienda influyen muchos factores, uno de ellos la orientación.
La orientación es un aspecto que no puede olvidarse, ya que influye en el confort térmico de los usuarios. Esto hace que una casa interior en la que el sol entra menos, sea más fría que aquella otra con una mejor orientación y más horas de sol. Dado que ésta última podrá aprovechar más el calor de la radiación solar.
Por eso, las viviendas que tengan una orientación más desfavorecida deberán tener aún más en cuenta los materiales de construcción, así como equipos de calefacción con suficiente potencia para hacer frente a este problema.
Otro aspecto de vital importancia es el aislamiento de la vivienda. Un edificio con cerramientos deficientes o un mal aislamiento sufrirá pérdidas de energía continuadas. Cuando esto ocurre, puede notarse en las noches de invierno que se necesita mucha más energía para elevar la temperatura por el enfriamiento excesivo del piso.
Si las ventanas, puertas, muros y persianas dejan pasar y salir el calor, más combustible gastará el usuario para lograr una buena temperatura de su vivienda.